Estos consejos los debemos a Robert Luis Stevenson, escritor escocés de finales del siglo 19, autor de dos novelas mundialmente conocidas: «La isla del tesoro» y «Dr. Jeckyll y Mr Hyde». En el 1878, para hacer un alto en su vida en respuesta a una pena del corazón, efectuó la travesía a pie de los Cevennes en Francia con un asno como única compañía. Esta aventura, le inspiró un libro: «Viaje con un asno en los Cevennes».
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Cuando nos enfrentamos a cualquier acontecimiento, lo clasificamos como positivo o negativo. Reaccionamos cada uno de forma diferente, según nuestros filtros de percepción (creencias, miedos, educación, vivencias del pasado, etc.). En realidad las cosas sólo pasan, son efectos que tienen una causa pero son neutros. Somos nosotros quienes le damos un significado cuando los evaluamos y los interpretamos. Es aquí, donde tenemos la posibilidad de actuar de manera consciente, en vez de simplemente reaccionar como un robot con un comportamiento listo a dispararse para cada tipo de situación que nos llega.
¡Hay que entender y aceptar que lo que pasó... pasó!!! Y ya no se puede cambiar!
Así, que en lugar de dejar que las emociones tomen el control, podemos dirigir la atención sobre los lados positivos de la situación. Aunque a veces parezca que no, siempre los hay.
Por ejemplo, si pierdes tu empleo, puedes verlo como una catástrofe o como la oportunidad de cambiar de profesión, de retomar tus estudios, de irte para otra ciudad, etc.
Hay personas que si llueve, se les daña el día, mientras otras ven la oportunidad de hacer otras cosas que tenían pendientes. Entonces sí!!! Es cierto… ¡Sí reímos más que lloramos frente a las situaciones de la vida, seremos más felices!
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Indulgencia es aceptar tus defectos y errores con compasión y comprensión. Es aceptar que el error es humano. Cuando reconoces tus errores, te sirven para que entiendas que debes mejorar ciertas habilidades o cambiar de estrategia para alcanzar tu meta, no para que te juzgues y te hagas reproches.
Cuando las cosas no se dan como quieres, deja de criticarte. La crítica nunca cambia nada. Cuando te criticas, alimentas tu baja autoestima y tus cambios son negativos. Sin embargo, cuando te apruebas, conectas con tu creatividad y tus cambios son positivos. ¡Donde enfocas la mente allí llegas!
Aprende a reírte de los contratiempos, no te enojes y usa ese tiempo de forma útil, por ejemplo haciendo algo que tienes pendiente o reflexionando cómo cambiar la situación a tu favor. Ve el contratiempo como algo no deseado pero útil. Es una pausa que te ofrece la vida, no la malgastes consumiéndote con pensamientos negativos ¡Aprovéchala!
Aceptar la situación no significa estar de acuerdo o resignado, significa que asumes la realidad sin sufrir por ella lo que te permite buscar mejores opciones. Solo tienes que tomar en serio lo que es realmente importante , para el resto sé indulgente, acéptate exactamente tal y como eres, no te juzgues, no te culpes, aprende a reír de las situaciones y serás más feliz!
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Tu misión de vida es conocerte, poner en valor tus aspectos positivos, reconocer tus defectos, de manera que las críticas de los demás no afecten tu opinión de sí mismo…
A querer gustarle a todo el mundo, pierdes de vista quien eres y lo que realmente quieres hacer en tu vida. ¡Decide no darle las riendas de tu vida a otros!
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Si el lugar en donde te encuentras en este momento, no es el lugar en el que quieres estar, tienes que actuar. Deja de perder tu tiempo, sal de tu zona de confort y decídete a ir a la zona de tus sueños, de tu éxito, de tus logros. ¡Atrévete a dejar de ser quien eres para ser quien quieres ser!
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Haz lo que quieras hacer... Hazlo porque te gusta. Hazlo porque te sientes feliz haciéndolo. Hazlo porque lo amas pero no te endeudes, porque las deudas te hacen siempre más pobre, como las deudas con tarjetas de crédito...
Las deudas te esclavizan, te obligan a trabajar en el futuro por cosas del pasado, no para vivir tus sueños.
¡No te endeudes y evitarás vivir pagando!
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Con este consejo Robert Louis Stevenson te invita a que dirijas tu atención y tus energías hacia tu vida y tus cosas...
Suficiente tienes con eso, como para enfocarte en buscar la solución de los problemas de otros, alimentar expectativas, pensar mal de los demás, inquietarte con problemas que aún no existen...
¡Es simple, liberarte!!!
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Cuando estás pasando por una situación difícil:- Céntrate en ti,
- Elabora una lista completa de tus recursos y apoyos,
- Supera los dolores y rencores,
- Sana heridas,
- Aprende la lección,
- Perdona si puedes… pero sigue adelante.
No vale la pena vivir la vida enojados, frustrados o dolidos. Pasado un tiempo, el rencor comienza a extenderse de forma tóxica en tu cuerpo con efectos negativos en la salud, mientras que perdonar te procura paz interior y te permite empezar de nuevo.
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El cerebro necesita continuamente nuevos retos para no envejecer. Mantener una mente abierta, ejercitar la imaginación y seguir aprendiendo cosas nuevas a lo largo de tu vida, es la mejor gimnasia para que tu cerebro sea capaz de detectar y aprovechar cada oportunidad que se presenta o resuelva tus problemas con mayor eficacia y creatividad. Así que sigue el siguiente consejo de Stevenson: Multiplica tus centros de interés y si no puedes viajar, recorre el mundo por tus lecturas. -
La tristeza te recuerda que te falta algo que ya no puedes tener (aunque sean buenos momentos del pasado) y te enseña la importancia de disfrutar y vivir el presente, porque como todo el resto, esto también pasará.
Cuando cometes un error o llegas a una situación que no quieres, no es fracasar, es la señal que tienes que rectificar algo o repetirás el mismo resultado. ¡No pasa nada por equivocarse, sólo debes intentar aprender de ello!
No te dejes vencer por el desaliento ni abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
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Lo que les das a otros, te lo das a ti. Lo que niegas, te lo estás quitando tú. Lo que les robas a otros, te lo robas a ti… Y no me refiero a bienes materiales, puedes regalar una sonrisa, un consejo, un poco de tu tiempo, un abrazo… Cuando perdonas al otro, te estás perdonando a ti mismo y apartas de tu vida el rencor y la tristeza.
El mundo es pura energía donde todo está conectado. Lo que va vuelve amplificado, es una ley universal que actúa creas en ella o no. Es la intención que pones detrás de tus acciones la que determina el resultado. Así que siempre recibes lo que das!
Te invito a que reflexiones acerca de lo que estás entregando en tus relaciones con los demás y qué estás recibiendo a cambio; Tal vez tú también te sorprendas...
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Cuando mantienes tu mente ocupada tiendes a sentirte más feliz que las personas que se aburren. Cuando te aburres, te surgen pensamientos negativos, ves tu vida demasiado gris, no tienes motivación para nada y es probable que te sientas cada vez más inconforme con lo que tienes.
Cada día que amanece es un regalo y una oportunidad para enriquecerse, puedes aprovechar tu tiempo libre para visitar amigos, aprender o probar cosas nuevas, practicar una actividad, meditar, leer… Un cerebro que funciona positivamente se mantiene joven, te hace sentir optimista y entusiasta.
Así que… ¡Mente ocupada, mente feliz!